Ethos y Confianza: cuidando los hábitos del corazón
Es imposible ir por la vida sin confiar en nadie; es como estar preso en la peor de las celdas: uno mismo. (Graham Greene, novelista)
Para hacer la vida más simple, en algún remoto momento de la prehistoria, apareció la necesidad de vincularse altruístamente con otros, para no ser engullido por la naturaleza desbordante o por la fiera de turno.